Socializan proyectos de infraestructura para Magdalena, Cesar y Barranquilla

Con el fin de priorizar proyectos e inversiones pertinentes para los departamentos de la región, los coloquios Casa Grande Caribe, realizó un encuentro para abordar temas de la infraestructura para el desarrollo y la transformación social.

La iniciativa, concebida en 2017 como una estrategia de superación del atraso social regional del Caribe colombiano, con estudios que estiman las necesidades de inversión en educación, nutrición, salud y acueducto y alcantarillado para cerrar la brecha regional, llevó a cabo el 2, 3 y 4 de agosto los coloquios de Magdalena, Cesar y Barranquilla, respectivamente.

El investigador Aaron Espinosa, del IDEEAS de la Universidad Tecnológica de Bolívar, destacó el impacto de que continúen generándose espacios de dialogo y socialización para abordar temas de gran alcance.

“En los últimos años ha habido una dificultad en la formulación de los proyectos, porque de cierta forma la pandemia evitó que esa capacidad técnica territorial se mantuviera y en consecuencia los proyectos tuvieran incidencia en el territorio. En el Magdalena, por ejemplo, ha habido una reducción sensible en las coberturas de acueductos y alcantarillado. Se dejaron de formular proyectos que atendieran la expansión de la población del departamento, por tanto, las coberturas se han reducido nuevamente a los niveles de 2015”, argumentó Espinosa.

Sobre acueductos y alcantarillados, la investigación señala que el Magdalena presenta una cobertura de acueducto de 4,9; calidad del agua 6,2; y 3,1 en cobertura de alcantarillado, lo que indica que el departamento se encuentra en un nivel bajo y necesita con suma urgencia el apoyo de las diferentes entidades para salir del atraso social.

Se requieren proyectos de cobertura de alcantarillado rural y urbano en Sitionuevo, Pueblo Viejo, Zona Bananera, Remolino y El Retén. Mientras que los municipios más rezagados en infraestructura de acueducto rural son Ciénaga, El Retén, Remolino, Pivijay, Plato, Chivolo, Algarrobo y Ariguaní; el más rezagado en su área urbana es Nueva Granada.

“Al preocuparnos por el transporte, en particular por las redes primarias y secundarias, incluso terciarias, estamos pensando en medios que le sirven al turismo, por ejemplo, el comunitario. También hablamos de que hay infraestructuras culturales y deportivas que soportan la industria del turismo”, indicó Espinosa. 

En cuanto a cultura y deporte, presenta mayor atraso, en su orden: inversión en infraestructura cultural, luego la deportiva y, por último, en la oferta de bienes culturales. Se busca que amplíen los proyectos de red departamental de museos y bibliotecas, la cobertura del servicio de internet.

Los municipios que presentan mayor oferta de bienes culturales se ubican en la parte norte del departamento: Santa Marta, Ciénaga, Zona Bananera, Aracataca y Fundación. Entre los años 2018 y 2021, las mayores inversiones en infraestructura deportiva se hicieron en Pedraza, Pivijay y Santa Ana. Además, la mayor inversión en infraestructura cultural se hizo en Ciénaga, Concordia y Pijiño del Carmen.

Es importante destacar que Casa Grande Caribe trabaja con estrategias de priorización mediante talleres participativos y recolección de información con grupos expertos, con representantes como: gobernadores, alcaldes, empresarios, academias y sociedad civil. El jueves, 3 de agosto, la cita fue en el Banco de la República de Valledupar, con la participación de expertos en diferentes sectores como acueducto, alcantarillado, transporte, adaptación al cambio climático, cultura y deporte, para revisar los proyectos de infraestructura y analizar cómo hacerlos y de dónde podrían salir los recursos para materializarlos.

Oriana Álvarez, directora ejecutiva de Fundesarrollo, destacó la necesidad de generar propuestas iniciativas que apunten a realizar cambio las sociedades. “Queremos que al menos se pueda priorizar un proyecto por sector, queremos que al menos sea una necesidad puntual y tratemos de sacar adelante desde el inicio hasta el fin esa iniciativa, porque hay una cantidad de propuestas y proyectos que no necesariamente se adaptan a la realidad del territorio pero que tampoco logran ejecutarse”.

El Cesar es el quinto departamento más poblado del Caribe colombiano y el segundo más desertificado del país. El 75 % de su población se ubica en las cabeceras y el otro 25 % en zonas rurales.

El 38 % del Producto Interno Bruto del Cesar está determinado por el sector de minas y canteras, pero para 2021 otros sectores ganaron importancia, lo cual se puede priorizar en el proceso de transición del aparato productivo: comercio, administración pública y agricultura, según Fundesarrollo.

“El departamento más pobre en 2012 era Córdoba, con el 66 % de su población bajo la línea de pobreza monetaria, y Cesar tenía el 51,7 % en pobreza monetaria. En 2019 Córdoba pasó a 54 %, pero Cesar mantuvo el 51,7 %. Con la pandemia sube la pobreza y Cesar pasa al 56 %. Uno de nuestros desafíos es la diversificación económica. Ya lo han dicho, no podemos seguir dependiendo del carbón y el proceso es gradual”, argumentó Fernando Herrera Araújo, director de CESORE, durante su presentación.

En un trabajo mancomunado con la CAF, una vez se tengan los proyectos priorizados, se revisarás sus costos con expertos sectoriales y otros grupos especializados. También se llevarán a cabo otros 2 estudios por Uninorte: la viabilidad del Tren Santa Marta-Barranquilla-Cartagena y las necesidades en materia de tecnologías de información y la comunicación (TIC).