Barranquilla, anfitriona de la asamblea número 61 del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), ha venido experimentando una evolución vertiginosa en los últimos 12 años.
No es una sorpresa. Se trata de una cuna histórica del empresariado colombiano, en la cual han nacido varias de las compañías más importantes y queridas de todo el país.
La Puerta de Oro de Colombia cuenta con grandes ventajas para las empresas que se instalan en su territorio: su acceso al río Magdalena y al mar Caribe, su creciente conectividad vial, portuaria y aeroportuaria, y los incentivos tributarios disponibles hoy para el impulso de la industria y del comercio.
Al tiempo, es un espacio urbano privilegiado, cada vez más reconectado con su río en el día a día, gracias a un malecón que demuestra que el espacio publico es para disfrutarlo con la familia y con los amigos, y que no hay nada mejor que una ciudad productiva en la que además haya calidad de vida.
Además, cuenta con una formación constante de su talento humano: entre 2001 y 2016 se graduaron 190.434 estudiantes, entre programas de pregrado y posgrado. Con más de 800 programas académicos de educación superior certificados es, según ProColombia, la segunda ciudad con mayor porcentaje de población bilingüe del país, después de Bogotá.
A lo anterior se añade la capacidad del departamento de generar desarrollo a través del sector de las manufacturas: el 54% de los empleos industriales en la región Caribe colombiana, se originan en el departamento del Atlántico, cuya capital es Barranquilla.
De acuerdo con el boletín técnico de cuentas departamentales del DANE para 2018, este departamento registra el producto interno bruto departamental más alto de la región Caribe, con un capital superior a los 43 billones de pesos, ocupando la sexta posición en el contexto nacional.
Barranquilla, gracias a su ubicación privilegiada y a sus conexiones aéreas, portuarias y terrestres con el resto del territorio nacional y el mundo, representa una gran oportunidad de negocios: facilita el acceso a un mercado de 1.500 millones de consumidores que habitan los países con los que Colombia ha firmado acuerdos comerciales. No en vano ha sido catalogada como la capital del Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos de América.
El Banco Mundial, además, catalogó a la capital atlanticense como líder en gestión pública, dado el compromiso interinstitucional constante de sus sectores público y privado con el desarrollo de proyectos y obras de infraestructura.
En buena medida, esto ha sido posible gracias a la magnitud de la inversión pública, la cual ha llegado a representar hasta un 5,6% de la actividad económica de la ciudad, según Fundesarrollo.
Ahora bien, esto va más allá del dinero. Es una cuestión de actitud. La ciudad que se precia de decir que todo aquel que quiera desarrollar un proyecto de vida es barrnaquillero, se caracteriza por asumir los retos y las grandes metas con entusiasmo y dedicación.
Desde el mismo instante en que fue designada, en julio de 2019, como ciudad anfitriona de la Asamblea del BID, la Puerta de Oro de Colombia se ha preparado de la mano de la Presidencia de la República para que ésta reunión sea considerada como la mejor en la historia de esta institución financiera multilateral.
Este encuentro internacional reafirma la amplia experiencia de Barranquilla en eventos de talla mundial: Ya había sido sede de los Juegos Centroamericanos y del Caribe en 2018. De hecho, la ciudad ha asumido con mucho dinamismo las actividades y gestiones necesarias para dar cumplimiento a todos y cada uno de los requerimientos específicos del Banco, especialmente en lo relacionado con el principio de sostenibilidad, algo que el organismo multilateral considera esencial en su operación.
En el evento se espera la presencia de más de 5.000 participantes durante los días de la Asamblea, del 18 al 22 de marzo de 2020. Las entidades encargadas de garantizar el buen funcionamiento en materia de seguridad, movilidad, cultura y turismo han coordinado todos los detalles para dejar en alto la capacidad logística y de atención de la ciudad.
Así que Barranquilla el puerto por donde el desarrollo empezó a abrirse camino en Colombia ahora se apresta a decirle al mundo que desde hace rato está lista para grandes cosas, y que cuando se trata de pensar en grande y de vivir con “sabrosura”, esta ciudad de puertas abiertas es el lugar adecuado.
Barranquilla es referente urbano, económico, deportivo y cultural de América. ¡Barranquilla está lista para el BID!