Buena parte del reconocimiento que tiene Cumbiamberos en la Batalla de Flores en el exterior es gracias a su Carnaval. Esta fiesta y todas las expresiones artísticas que caracterizan a la ciudad, hacen del sector cultural uno de los más dinámicos y por eso, las industrias creativas y culturales serán uno de los temas transversales durante el desarrollo de la Asamblea BID 2020, según ha expresado su gerente para Colombia, Karen Abudinen, consejera presidencial para las regiones.
El Carnaval de Barranquilla, la fiesta más grande del país, comenzó a ser organizado por la empresa Carnaval S.A.S. a partir de 1991, lo que representó el inicio de una era de importantes cifras económicas que arroja cada edición anual, partiendo de lo que cuesta su misma organización y lo que se mueve alrededor de ella.
Desde entonces, con el sepelio del emblemático Joselito, el personaje que da fin a cuatro días oficiales de la rumba carnavalera en la antesala del Miércoles de Ceniza, varios organismos como la Cámara de Comercio de Barranquilla, Fundesarrollo, Fenalco, Cotelco y la Alcaldía de Barranquilla, entre otros, se dan a la tarea de tabular información y entregar cuentas a los interesados.
Para Carla Celia, actual directora de Carnaval de Barranquilla, hablar de los beneficios económicos que representa la fiesta es destacar las oportunidades de empleo, formal e informal, tanto en la pretemporada como en los cuatro días de la temporada.
“Realmente, es una generación de empleo muy grande. Tenemos oportunidad de desarrollo social, de turismo y de visitantes en Barranquilla”, asegura la dirigente, al tiempo que destaca que todo está acorde con la tendencia de la economía naranja que promueve el actual gobierno y que será mostrada en la Asamblea BID 2020, entre los días 18 y 22 en Barranquilla.
La misma empresa, a la que se han sumado 28 organizaciones operadoras de la fiesta, estima que cada año se deben destinar en la organización de eventos, aportes a hacedores, contratación de la logística, entre otros aspectos, un presupuesto que se mueve entre los 20.000 y 25.000 millones de pesos, de los cuales un 49 por ciento se consigue mediante aportes gestionados ante la empresa privada.
Carnaval con impacto
El reporte del Carnaval de 2019 destaca indicadores que reflejan su impacto. Por ejemplo, en cuestión de visitantes los días de la temporada, vía aérea ingresaron 17.469 personas, de las cuales el 89,88 por ciento fueron nacionales; a través de la vía terrestre, según la Terminal de Transporte, el incremento fue el 33 por ciento con respecto a días normas, en total 43.073 viajeros llegaron a gozar la fiesta.
En promedio un carnavalero local, de estrato bajo, gasta 241.000 pesos diarios en diversión; mientras uno de estrato medio destina 332.000 pesos; y el de estrato alto, 452.000 pesos. Entre tanto, para un rumbero que viene de visita el gasto promedio diario es de 774.000 pesos. El resumen global de lo que movió el Carnaval de Barranquilla el año pasado revela que se llegó a los 384.936 millones de pesos.
En comparación con cifras de carnavales de otras latitudes de Latinoamérica, las de la capital del Atlántico son moderadas, lo que muestra su potencial en crecimiento. En un artículo de la revista Dinero se muestra que al Carnaval de Río de Janeiro (Brasil), considerado el primero, acuden un promedio de 1,5 millones de extranjeros y se recaudan 1.100 millones de dólares; el segundo es el de Panamá, al que llegan 25.000 turistas y mueve 300 millones de dólares.
El de Barranquilla, que es el tercero, es visitado por 300.000 turistas y genera un movimiento de 69 millones de dólares. De allí que, con la expectativas que genera la presencia de los miembros del BID, más los invitados, que sumarán un número cercano a las 7.000 personas, se espera abrirle espacio a los inversionistas extranjeros en las denominadas industrias creativas que cuentan con el apoyo del Gobierno Nacional y en las que Barranquilla juega papel primordial.
“Haremos la mejor Asamblea del BID en su historia, y eso será muy beneficioso para el potencial de la economía naranja y de las industrias creativas y culturales en Barranquilla y toda Colombia”, expresó la consejera presidencial y gerente del evento para el país, Karen Abudinen.