Publicado el 4 de noviembre de 2020
Barranquilla, al igual que muchas ciudades ha perdido terreno en los avances que tuvo en superación de la pobreza urbana, como efecto de la pandemia del Coid-19. La inseguridad alimentaria es prueba de ello.
De acuerdo con la Encuesta Pulso Social del DANE, en la capital del Atlántico hasta septiembre, el 46% de los hogares disminuyeron la ingesta de alimentos a dos platos o menos diarios, a raíz de la falta de ingresos durante la emergencia sanitaria.
Kelina Puche, directora de Fundesarrollo, manifestó: «Barranquilla Cómo Vamos había reportado que entre el 2018 y 2019 la ingesta de tres alimentos diarios en los hogares barranquilleros había mejorado del 18% al 22%.»
Agregó que la cifra en Barranquilla es superior a ciudades como Bogotá (20,7%), Cali (23,7%) o Medellín (28,6%).
Fundesarrollo había emitido en el 2019 un informe en donde señala que sin acceso permanente a la alimentación están el 65% de los hogares en la región Caribe, que si bien representa una disminución de 6.9 puntos porcentuales durante los últimos nueve años, la cifra aún es alta, dejando entrever que existen muchas familias en precarias condiciones.